En las múltiples batallas que el ser humano ha librado desde el siglo 20 ha estado presente el tanque de guerra, este es el fiel ejemplo del poder de la mente humana para destruir las demás, bien haya sido por motivos de política, ideología o religión. Una de las marcas pioneras en el diseño de estas máquinas fue la compañía francesa Renault, que durante la 1era guerra mundial fue el fabricante más influyente en este campo.
El Renault FT-17 fue el elegido por la compañía francesa para hacerle frente a los ejércitos de la triple alianza, que azotaban toda Europa con sus tanques alemanes, construidos directamente por el ejército del Imperio alemán. Este tanque es conocido por ser el primero en llevar la estructura típica de lo que hoy conocemos por tanque de guerra, con un cañón que sobresale de la estructura y una torreta como arma secundaria. Este pesaba apenas 6.500 kilogramos y contaba con un cañón de 27 mm.
Además de Renault, la marca italiana Fiat sacó a relucir su modelo Fiat 3.000 basado en el modelo del FT-17; otro tanque ligero de torreta rotativa y un cañón de 35 mm.
En la actualidad, estas marcas se dedican de lleno a la fabricación de vehículos comerciales; sus tiempos de impulsar la guerra terminaron después de la 2da guerra mundial, en el caso de Renault con el modelo R35; ya que competidores externos (rusos y norteamericanos) se metieron de lleno en la fabricación de estas máquinas demoledoras.
Los tanques de guerra siguen siendo de las armas más poderosas creadas por la humanidad; esto sin tener en cuenta armas más grandes como las bombas nucleares o las nuevas armas químicas ingeniadas por los gobiernos. El carro de guerra siempre será recordado como el primer demoledor en masa creado por el ser humano para mermar a los demás; demoledor que seguirá evolucionando junto con los avances de la humanidad.
Este fue el último espacio escrito del diseño de automóviles, dedicado para los tanques de guerra, que seguirán sorprendiéndonos cada día más. Gracias.